El Madrid no juega finales, las gana. No sé cuando empezó, pero el caso es que fue hace casi 30 años. Hace un par de semanas, se conmemoraba el 26 aniversario de la Séptima Copa de Europa para uno de mis equipos españoles, el Real Madrid, cuando Mijatovic marcó on site (que no off site, o en fuera de juego) ante la cara de los aficionados de la Juventus de Turín. Toda una sorpresa para un equipo que partía como favorito frente a un equipo español que no hizo una gran temporada, y ya hacía 32 años que había ganado la última Copa de Europa, cuando ni siquiera se le había cambiado el nombre a Champions League. Para algunos aficionados al fútbol, sobre todo para los de la otra acera (culers) esta Copa era la primera de las de verdad… Nada mas allá de la realidad, por supuesto, mis queridos lectores. Menuda envidia… 😜.

Así pues, corría el año 1998 cuando mi padre me regaló la primera camiseta de fútbol. Cuál te gusta, Javi? Estuve tentado de elegir el 7 de Raúl, ya que ése era mi número favorito, pero finalmente me decanté por la camiseta del goleador de la final de la Champions League que certificó el título para los blancos. Me gustaría el 8 de Mijatovic. Ya no puedo ponerme esa camiseta, por la talla, pero es una de las 39 que cuelgan dentro de mi armario.

Pronto, llegaría el Mundial de Francia, y entonces, vería muchos partidos, no sólo de la Selección Española. La Roja no hizo un gran torneo, quedando eliminada en fase de grupos, tras la derrota contra Nigeria y el empate con Paraguay. El 6-1 contra Bulgaria, que recuerdo perfectamente que lo televisaron mientras transcurria la fiesta de mi recién terminado Cuarto Curso de Primaria en el colegio, nunca sirvió para nada. Para mis lectores amantes del fútbol, no es necesario decir que la Copa del Mundo fue conquistada por el equipo francés. Pero sí es necesario mencionar que fue la revancha de un todavía joven Zinedine Zidane después de haber perdido la Copa de Europa de clubes con la Juventus contra el Real Madrid. Enhorabuena, Zizou, ¡nos vemos tres años después!

Y efectivamente, tres años después fue mi primer (y único hasta ahora, en un estadio) partido de fútbol del Real Madrid. Fue el primer partido de Zidane con la camiseta blanca en el Santiago Bernabéu en Liga. Roberto Carlos fue el goleador de mi Madrid y Fernando Sanz, hijo del anterior presidente del Real Madrid, el que empató para el Málaga CF.

Volvemos dos años atras de ese partido en el Bernabeu, pero es porque mi otro equipo español, el equipo de la ciudad donde nací, el Córdoba CF (se puede ver una bufanda en la foto de arriba, colores blanco y verde, rojo y blanco en el centro del escudo y coronado en la parte superior), ascendió a la Segunda División Española, hoy denominada La Liga 2. Desde entonces, mi padre y yo estuvimos en algunos partidos de esa y de las siguientes temporadas. Recuerdo los empates contra Salamanca, Badajoz, Getafe, la derrota contra el Levante, con Mijatovic en aquel equipo 😃, y un empate contra el Oviedo, que fue, mi último partido en el Nuevo Arcángel, en 2018, en esta ocasion con un amigo. En la tele, recuerdo aquel primer partido ganado al Athletic de Bilbao en Liga, en diciembre de 2014. Fue en casa de mi buen amigo Carlos Arroyo, un gran tipo que fue la primera persona que conocí en York, Reino Unido, y desde entonces, hicimos una verdadera y fuerte amistad. Allá donde estés, espero que seas feliz y viendo fútbol, lo que nos encantaba hacer cuando vivíamos en la misma ciudad (aunque de alguna manera, seguimos haciendo años y años después).

En Inglaterra, creció en mí una pasion especial por el fútbol. Unos años antes, decidí no volver a pedir a mis padres que me regalaran más camisetas de fútbol, por lo mucho que costaban. Cuando conseguí mi primer trabajo, y empecé a ganar mi propio dinero, entonces, me las empecé a regalar a mí mismo, pero aparte de algunas excepciones como el 8 de Robinson en la temporada después de que el Liverpool ganara su 19º título de la Premier League, y el 7 de Raúl en el Schalke 04 (una camiseta que siempre quise desde mucho tiempo atrás), siempre traté de comprar camsetas a un precio más o menos asequible.

Tras mi regreso a Inglaterra en octubre de 2018, decidí hacerme socio de los Wolves, el equipo de la Premier League más cercano al lugar donde vivía en ese momento. Mi primera temporada fue pobre en partidos vistos en The Molineux. Pero durante la segunda temporada, estuve presente en hasta 14 partidos, y eso que en primavera tuvimos que encerrarnos en casa (como el resto del mundo) debido a la Pandemia. Los partidos de la Europa League fueron los más especiales, ya que el equipo volvía a la competición europea tras su ascenso justo una temporada antes. En esa temporada, pude ver mi primer equipo del Big Six inglés: Wolves contra Liverpool, partido del que guardo la bufanda conmemorativa del mismo. Además, conseguí la firma de un joven Pedro Neto, en otro encuentro, y una siempre recordada foto con Quique Sánchez Flores tras la derrota de su Watford por 2-0 ante mis Wolvinhos. La temporada siguiente, lo vi todo desde casa, debido a las restricciones del Covid-19. Pero en mi cuarta temporada como socio de los Wolves, pude ver al Manchester United y al Tottenham Spurs. Y en mi última temporada como socio, vi partidos contra el Manchester City (estuve presente en los dos primeros goles de Erlingo Haaland al Wolverhampton Wanderers) y el Arsenal, un gran equipo que estuvo a punto de ganar su primer título de la Premier League después de dos décadas.

Eso ocurrió justo justo antes del Mundial en el que no vi ningun partido completo, como veto a un país que nunca debería haber celebrado el torneo. Mis queridos amigos de La Media Inglesa describieron muy bien (en su canal de YouTube) los teje-manejes de la FIFA que terminaron en la adjudicación de la sede de la Copa 2022 al país de Oriente Medio. Una vergüenza. Después de eso, y hasta mas un año después, se puden contar con los dedos de una mano (como decimos en España) los partidos de fútbol que vi. Perdí el interés por el fútbol e incluso solo me compre una camiseta en 12 meses. Mis amigos me decían que era porque era novio de una chica que odiaba el fútbol. Yo sabía que no era del todo cierto. Además, puedo admitir que si en el momento de la Copa del Mundo hubiera estado soltero, incluso me hubiera quedado en casa y no haber visto ningún partido de fútbol. Pero bueno, la realidad era la que era, y por ir a ver a unos amigos durante un Francia vs Inglaterra en diciembre de 2022, puedo decir que fue el primer partido de fútbol que me quedé justo debajo de la tele, mirando hacia el lado contrario, para no ver ni una sola jugada. Hice casi lo mismo en la final que enfrentó a las Selecciones Francesa y Argentina. Enhorabuena por nuestros hermanos, pero tarjeta roja, una y otra vez, para la corrupción en el fútbol.

Seguramente los mencionaré en otra entrada, pero antes de terminar de escribir este episodio, tengo que decir que La Media Inglesa me ha ensenado a ver el fútbol de otra manera. El canal de YouTube que empecé a seguir en junio de 2020, y que en diciembre del mismo año, me hice miembro Premier League (categoría superior de entre todos sus niveles), es ahora uno de mis pasatiempos favoritos durante la semana, viendo o simplemente escuchando en casi cualquier momento del día, en el trabajo (en días no muy ocupados), conduciendo, en el sofá, cocinando o justo antes de irme a dormir, puedo decir que es mi tesoro (como diría Gollum, personaje de El Señor de los Anillos😂), al igual que SergioBasket_Vlogs, que ya mencioné unas entradas atrás en el blog.

Y hasta aquí mi Pasión por el Fútbol, quizás la entrada más larga de este blog, al menos hasta el momento, pero también, una versión bastante reducida para describir todas mis experiencias relacionadas con el fútbol. Espero que os guste tanto como a mí. Y si no, como dije con Mi Aficion por el Baloncesto, deseo que, al menos, hayáis disfrutado de esta historia. Dadle el mismo cariño que yo mientras recordaba todos estos 26 años…